Claudio Ptolomeo fue un científico, astrónomo, geógrafo y matemático de la antigua Grecia. En el transcurso de su vida sus hallazgos fueron de vital importancia para el desarrollo de la ciencia. En el artículo de hoy, ahondaremos acerca de su persona así como sus logros en los diversos campos que incursionó.
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Biografía de Claudio Ptolomeo
Hasta el día de hoy no hay mucha información que cuente acerca de la vida de Claudio Ptolomeo antes de sus descubrimientos en diversas áreas de la ciencia. Por los momentos se sabe que nació en el año 100 en la antigua Grecia, pero no permaneció allí por mucho tiempo ya que gran parte de su vida estuvo en Egipto, donde trabajó en la Biblioteca de Alejandría.
La vida de Ptolomeo estuvo dada en la ciudad de Alejandría en Egipto, tuvo gran parte de su formación en muchos campos durante el reinado de los emperadores Adriano (del año 117 al 138) y Antonino Pío (del año 138 al 171).
La historia considera a Ptolomeo como un miembro fundamental en la creación de la segunda parte de la escuela alejandrina. Este suceso tuvo lugar en los dos años que siguieron luego de la expansión del Imperio Romano.
Mientras estuvo en la ciudad de Alejandría, su casa de estudio fue su biblioteca. La misma le proporcionaba una serie de libros, ensayos y demás información acerca de los planetas, la geometría y la matemática que serían el pie de inicio para sus obras posteriores.
Se sabe además, que una de las labores que mantenía en ese lugar a cambio de dejarlo explorar el material informativo, era sistematizar toda la información de gran parte de los libros que tenía a su disposición, la cual podía abarcar una vasta parte de la historia, hasta un poco más allá de la muerte de Jesucristo.
A partir de estas sistematizaciones y recogidas de información que le dejaban encargado, se fue introduciendo en los ámbitos científicos en donde el tema central recaía en el estudio de los planetas y sus movimientos en el espacio.
Su actividad en los campos de la ciencia se conoce desde el reinado de Adriano (Rey de Grecia) hasta llegados los últimos momentos del año 141 d.C. Al crear su catálogo de descubrimiento de estrellas, tomó como referencia el año del comienzo del rey Antonino Pío (138 a.C.) para no tener datos erróneos en cuanto a sus coordenadas.
Cladio Ptolomeo fue el último representante de la historia de la astronomía, es por este motivo que su estudio y sus primeras observaciones debían hacerse en el templo de Serapis en Canopus, cerca de Alejandría ya que era una tradición para todos los interesados en esta ciencia.
No obstante, la astronomía y la astrología (ciencia que estudia los objetos celestes del espacio) no fueron sus únicos intereses, también desarrolló una carrera en las matemáticas y a partir de allí, combinó estas ciencias para crear su primera obra llamada Sintaxis Matemática.
Esta obra se volvió famosa e influyó tanto a la astronomía árabe como Europea, hasta llegar a la época del Renacimiento, un período de transición de la edad Media a la era moderna. Estaba conformada por trece volúmenes y para poder distinguirla de otras obras que salían a relucir para el momento, la denominaron Megalé, que significa grande o extensa.
A raíz de la inspiración y admiración que la obra causaba entre los lectores, poco tiempo después decidieron nombrarla como Megisté (la grandísima, la máxima). Al transcurrir los años, se solicitó que las páginas de esta fueran traducidas del árabe para que otras regiones pudieran gozar de su información.
A través de datos recogidos por científicos en el área antes que él, Claudio Ptolomeo realizó con mucha precisión un sistema en donde representaba al mundo, los movimientos exactos del Sol, la Luna, y los cinco planetas que habían sido descubiertos en aquel entonces.
A dicho sistema lo denominó geocéntrico, pues según Ptolomeo, la Tierra era el único planeta que permanecía estático, mientras que los demás objetos que se encontraban a su alrededor: Sol, Luna, planetas y estrellas, poseían un movimiento giratorio entorno a ella.
Este sistema sirvió como una base para estudios posteriores que perseguían el mismo objetivo que Ptolomeo: entender cómo eran los movimientos de los objetos espaciales y si la Tierra, era un planeta estacionario o poseía un propio movimiento.
Con el paso del tiempo, sus modelos quedaron para el estudio y apoyo de otros científicos. En el año 1543, el astrónomo Copérnico tomó de base las anotaciones de Claudio Ptolomeo para la creación de su teoría heliocéntrica, en la que planteaba que la Tierra giraba sobre sí misma y el Sol se mantenía estático.
Un elemento destacado de Claudio Ptolomeo, era su deseo en que cada teoría y obra que realizara fuera comprendida a la perfección por cualquier persona que la leyera, ya fuera o no miembro del gremio de la ciencia. Su deseo era que todos pudieran poseer este conocimiento.
Bajo esta premisa, trató de que cada obra que realizara tuviera un lenguaje sencillo para que pudiera llegar al alcance de todas las personas. Este hecho lo hacía además con el fin de que sus aportes perduraran con el paso del tiempo.
De esta manera, realizó una segunda versión de su primera obra en la que explicaba su modelo geocéntrico del universo empleando un lenguaje más simple y reducido, sin la utilización de términos matemáticos. La misma estaba dirigida al púbico que no poseía conocimiento alguno en el ámbito numérico.
Aportes de astronomía
Como ya lo hemos mencionado, Claudio Ptolomeo se desenvolvió en diversos campos de la ciencia tales como: las matemáticas, la química, la geografía, la astrología y por último, la astronomía. Sin embargo, sus mayores contribuciones al mundo fueron a partir de los dos últimos campos referidos.
A pesar de esto, el astrónomo no solo empleó conocimientos de esta ciencia, ya que las contribuciones que dejó para las siguientes investigaciones poseían una combinación de conocimientos matemáticos y geográficos que le dieron sustento a su material de estudio.
Ptolomeo creó su propia concepción o perspectiva del universo de dos grandes filósofos: Aristóteles y Platón, no obstante, mientras ellos abarcaban una visión macro acerca del mismo, la perspectiva que él concebía era del tipo empirista.
El empirismo plantea que la formación de cualquier idea o teoría tiene sus bases en la experiencia de cada individuo, haciendo hincapié en la percepción sensorial. En este sentido la distinción entre ambas perspectivas radica en que estos filósofos nunca tuvieron experiencias propias para corroborar sus teorías.
En otras palabras, las teorías filosóficas que crearon acerca del funcionamiento del universo y los planetas estaban basadas únicamente en sus propios pensamientos, sin llevar nada a la comprobación. Por otro lado, Claudio Ptolomeo llevaría a la práctica dichos pensamientos para validarlos o falsearlos.
El trabajo al que se dedicó en la parte astronómica, estuvo basado en el estudio de material ya existente acerca de los movimientos rotativos de los planetas, para así construir su propio modelo geométrico que explicara dichos movimientos del pasado y lograr predecir los futuros.
La ciencia griega tenía dos formas de dar explicación a los acontecimientos de la naturaleza. La primera era la realista, esta consistía en brindar una explicación desde el punto de vista de la lógica y la razón, dando entonces una respuesta muy estructurada y rígida.
La segunda era desde un punto de vista positivista, lo que significaba que las explicaciones eran radicales, es decir estas eran de acuerdo a lo que se veía, no importaba la relación que existiera entre dos objetos, el hecho es que así sucedía y como tal debía ser aceptado.
Ptolomeo afirmó que su intención no era descubrir cómo venía dada la realidad, que solo era un sistema para el cálculo. Por lo que el método científico era de carácter positivista, oponiéndose entonces a la postura de Aristóteles.
Un ejemplo de esto último sería si tomáramos en cuenta las órbitas de los planetas (lugar donde los mismos se mueven) que el mismo planteó, al darnos cuenta son extrañas y sin una forma geométrica establecida, mientras que las vistas por Platón y Aristóteles son redondas y asimétricas.
Modelo del universo geocéntrico
La teoría geocéntrica, tal como lo indica su nombre, plantea que la Tierra es el centro del universo porque permanece en estado inmóvil, mientras que los demás elementos a su alrededor (Sol, Luna y planetas) poseen un movimiento rotativo entorno a ella.
La misma también es conocida como el modelo del universo geocéntrico o sistema de Ptolomeo. Su origen se encuentra en la antigua Grecia, de la mano de un diverso grupo de filósofos y recibe su nombre cuando Claudio Ptolomeo plasmó algunas de sus interpretaciones en su gran obra ya mencionada.
No obstante, vale la pena acotar que esta teoría no solo tiene sus orígenes en Grecia, esto se remonta mucho más allá en la historia, dado que el conocimiento de cómo el universo estaba concebido era fundamental en diversos lugares, como por ejemplo, la antigua Babilonia.
Volviendo a los planteamientos de la obra de Ptolomeo, él explica la forma en cómo todos los objetos que se encuentran alrededor de la órbita de la Tierra giran entorno a ella. Añadiendo además, las teorías de los modelos geométricos de los epiciclos, ecuantes y deferentes de Apolonio de Perge.
Dichos modelos planteaban los movimientos aparentes de los planetas, así como las variaciones en la velocidad de sus cambios de dirección. Esto sirvió como sustento a su propia teoría y le dio pie a entender su funcionamiento.
El funcionamiento por el que se regía el sistema de Ptolomeo era muy complejo, puesto que se basaba en una serie de círculos que se encontraban en una constante interacción entre ellos, por lo que resultaba algo abstracta de comprender en su totalidad.
Ptolomeo postulaba que los planetas se movían alrededor de un círculo pequeño denominado epiciclo y que al mismo tiempo, dichos círculos se encontraban encima de otros de mayor tamaño llamados deferentes, en donde los planetas también se movían.
Para una comprensión más detallada sobre esta teoría, Claudio Ptolomeo introdujo lo que llamó ecuante. El mismo se entiende como un dispositivo matemático creado por el astrónomo con el fin de entender el movimientos de los planetas estudiados.
En este sentido, el punto medio dentro del círculo mayor (deferente) no sería la Tierra en sí misma, sino un punto cercano a la mitad entre la Tierra y el dispositivo matemático agregado. La introducción del ecuante fue clave para la solución de las discrepancias numéricas que afloraban al inicio de su estudio.
La explicación del funcionamiento de estos factores que dio Ptolomeo consistía en que el deferente se encuentra rotando alrededor de la Tierra, mientras que el epiciclo lo hace en el deferente, haciendo que el planeta que se encuentra en él, se acerque y aleje de la Tierra.
En algunas oportunidades observó que el movimiento rotativo cambiaba su velocidad en ciertos lugares de la órbita de la Tierra, haciendo incluso que la dirección fuera inversa, lo que se conoce como movimiento retrógrado. El estudio de Ptolomeo se basó gran parte en dar respuesta al por qué de estos movimientos en reversa de los planetas.
El modelo planteado por el astrónomo logró mantenerse vigente por muchos años, a pesar de las críticas encontradas en su teoría, la introducción del ecuante fue lo que mantuvo a flote su sistema hasta llegar al siglo XVI.
Sin embargo, con el tiempo se crearon nuevos mecanismos de tecnología que abrieron paso a nuevos planteamientos en muchas áreas de la ciencia, entre ellas la astronomía. Con esta nueva era, llegó una segunda teoría dada por otro astrónomo conocido como Copérnico, quien impuso la postura Heliocéntrica.
Este modelo era lo opuesto a lo argumentado por Claudio Ptolomeo, ya que exponía que la Tierra no permanecía estática, sino que era esta la que tenía un movimiento rotatorio sobre el Sol, lo cual tuvo base en las observaciones realizadas al mismo a través de los telescopios.
Astrología
Los individuos pertenecientes de la antigua Grecia, tenían la creencia de que su personalidad y carácter tenía mucho que ver con el posicionamiento del Sol o la Luna al momento de su nacimiento, y que este sería un factor determinante en el resto de sus días.
De esta forma, la astrología es entendida como una rama de la ciencia que está fundamentada en conocer los posibles eventos y situaciones que se pueden llevar a cabo a causa del posicionamiento de los planetas y otros objetos del espacio.
Asimismo, Claudio Ptolomeo dedicó gran parte de su aprendizaje en la ciencia al estudio de los movimientos de los planetas, de manera que el enfoque de la astrología no estaba lejos de ser un punto clave para sus otros aportes.
El aporte más fundamental que realizó para esta rama, fue crear una obra de cuatro libros llamada Tetrabiblis. En ella se encuentra su investigación extensa y detallada acerca de los principios de la astrología y el horóscopo, siendo el creador de esto último.
El horóscopo se entiende como una carta de predicción basada en la posición arbitraria que asumen los planetas y otros astros del espacio. A pesar de que en la antigua Grecia esto fue de gran ayuda a la comprensión de la persona, en realidad no existe evidencia que sugiera que los planetas influyen en la personalidad.
En las teorías astrológicas que expuso en su obra, hacía referencia a las dolencias y enfermedades que la persona podía padecer de acuerdo a la posición en la que estuviera el Sol, la Luna y las estrellas.
Adicional a esto, argumentaba que cada uno de los cuerpos celestes que se encontraban en el espacio tenían una influencia específica en diferentes áreas del cuerpo humano. Un ejemplo de esto, era que los dolores de cabeza estaban asociados al Sol y a la Luna.
Aportes a otras ciencias
Como ya lo hemos comentado, Claudio Ptolomeo fue una eminencia en el campo científico, contribuyó en gran medida en el desarrollo de teorías que dieron entradas a otros modelos y sistemas que se basaron en sus hallazgos, sobre todo en el área de la astronomía y la astrología.
Sin embargo, no fueron los únicos campos en los que mostró interés y desempeño. El mismo a partir de sus descubrimientos en los dos primeros campos, tomó partido en otros aspectos de la ciencia, incluso en el medio artístico.
Geografía
Entre sus aportes más destacados en este campo está la culminación de la obra Geografía, que en un principio fue escrita por otro geógrafo llamado Marino de Tiro.
El material que se encuentra dentro de este libro incluye diferentes modelos matemáticos, empleados para diseñar de manera exacta mapas geográficos. En esencia, es una recopilación de coordenadas de lugares que ya habían sido explorados y de los cuales se tenía información suficiente y pertinente para su graficación.
A pesar de que la creación de este sistema de mapas fue un precedente para distintos viajeros y estudiosos del campo, Ptolomeo se tomó la libertad de incluir una extensión de los continentes Asia y Europa, no obstante, la misma contenía muchos errores de ubicación, por lo que la eliminaron.
Sin duda, Ptolomeo fue uno de los precedentes más importantes en el campo de la geografía. A pesar de que en algunos de sus cálculos y diseños tuviera errores con respecto a las coordenadas de longitud y latitud, sus aportes marcaron un inicio para los grandes viajes y exploraciones.
Una afirmación que surge por los descubrimientos realizados por Claudio Ptolomeo, es que fue el precursor de dos conceptos importantes en el campo de la geografía: el paralelo y el meridiano. Los mismos se entienden como las líneas imaginarias que dividen al globo terráqueo.
Asimismo, logró reducir los conocimientos dados por la cultura greco-romana, pudiendo así realizar el trazo de líneas curvas en mapas planos, dando una imagen más optima. Por medio de este hecho, la Iglesia Católica adoptó sus fundamentos dejados en su modelo geocéntrico, alegando que estaban en total acuerdo con su postura.
De hecho, las estimaciones dadas por Ptolomeo en cuanto a la extensión de la Tierra y los lineamientos del continente Asiático y Europeo, fueron las que llevaron a Cristóbal Colón a realizar su viaje para descubrir América, siendo el viaje más importante en la historia.
Música
No cabe duda de que las habilidades de este individuo no conocían un límite, ya que no solo realizó grandes aportes científicos, sino que además entró en el medio artístico de la música, en donde también dejó su huella.
Al ser un gran experto en el medio de las matemáticas, vio que estas también tenían un complemento en la creación de notas musicales, para dar así con una melodía y poder hacer una canción que deleitara los oídos de quienes la escucharan.
De esta forma, Claudio Ptolomeo escribió otra obra titulada Harmónicos. Él pensaba que las leyes matemáticas no solo estaban dentro del estudio de los cuerpos celestes del espacio, sino que tenían un sentido subyacente en las notas musicales.
Comparaba la creación de estas, su posicionamiento e incluso la distancia que se tenía entre una nota musical y otra con el mismo funcionamiento de los planetas en su modelo del universo geocéntrico.
No obstante, originalmente esta comparación de ambos medios surgió en un primer momento por el filosofo Platón cuando escribió su obra La armonía de las esferas. En ella plantea, que la ubicación de los planetas y su movimiento producía su propia música y que los espacios entre los mismos eran parecidos a los intervalos de notas.
Ha sido todo por el artículo de hoy, esperamos que la información brindada haya sido de gran ayuda. Le hacemos la invitación leer también: Analema y Límite de Roche