El Regolito es un término que permite identificar las partículas y fragmentos de minerales y roca que se depositan sobre una superficie, pero no forman parte del suelo. Este término se usa para referirse a materiales similares presentes en la Luna. Descubre todo sobre el Regolito a continuación.
Indice De Contenidos
¿Qué es un regolito?
Un Regolito viene a ser la capa de materiales no consolidados que han sido alterados y que se encuentran depositados sobre la roca sólida, es decir que un regolito puede ser partículas o fragmentos de minerales, rocas y cualquier depósito superficial que no ha sido meteorizado lo suficiente como para formar parte del suelo.
Este término de Regolito, tal como se indica en la descripción anterior, puede ser utilizado para materiales y fragmentos ubicados y depositados en el planeta Tierra, como aquellos que se encuentran alojados en otros componentes del Sistema Solar, como por ejemplo la Luna. Es por ello, que se puede hablar de regolito lunar.
Cuando Neil Armstrong dejó su huella marcada en la superficie de la Luna, realmente lo que pisó fue el regolito lunar, que es todo ese polvo que recubre la superficie de la luna, el cual es resultado de la fragmentación de rocas y minerales que se encuentran depositados sobre la roca subsuperficial de la Luna.
Estos fragmentos de roca y mineral pueden surgir por los impactos que se producen entre los diferentes cuerpos celestes, los cuales fracturan las superficies de éstos, generando partículas que pueden ser de diferente tamaño y que van desde polvo cósmico hasta bloques con un tamaño considerable.
Tipos
En función de la descripción anterior, se entiende que un regolito es la capa de rocas sueltas y fragmentos de minerales que se depositan sobre la superficie de la roca, pero no forman parte del suelo. Se sobreentiende que este material puede entonces encontrarse en cualquier superficie del Planeta Tierra, sin embargo, dependiendo de su ubicación y disposición recibe un nombre.
Por ejemplo, el Canchal es un tipo de regolito que se encuentra ubicado en la superficie de las laderas de las montañas cuando se producen procesos de meteorización, que no es más que la descomposición de los minerales y las rocas que por efecto del agua, la temperatura, los microorganismos, entre otros factores, degradan el material.
La acción de los factores señalados provoca su degradación y ruptura, especialmente en aquellos que se encuentran dispuestos en la superficie o cerca de ella. Entonces ocurren desprendimientos del material, el cual se dispone en forma de abanico sobre las laderas, a esta disposición de los fragmentos de rocas se les llama canchal y son característicos de los sistemas de montaña.
El otro tipo de regolito es el regolito lunar, como ya hemos señalado se trata de un material no consolidado, conformado por fragmentos de roca y por minerales que se disponen sobre la superficie rocosa de la Luna.
Este tipo de regolito lunar puede tener diferentes orígenes, ya que se pueden generar de la fragmentación de las rocas y minerales por el bombardeo de meteoritos, también la incidencia de la radiación solar y los cambios de temperatura, son algunos de los factores de meteorización que se produce sobre la superficie lunar, generando el regolito lunar. Se describe su textura parecida a la arena mojada de la playa y presenta un color oscuro sin llegar al negro.
La acumulación de regolito lunar en la superficie de la luna varía de acuerdo a la profundidad entre las zonas montañosas y las regiones de los mares lunares. Los análisis realizados a las muestras de regolito lunar han arrojado la presencia de diferentes tipos de rocas, entre los que se encuentran el feldespato, el cual es un mineral de silicato de aluminio, conformado por un sistema ternario de albita, ortoclasa y anortita.
Otro material es el piroxeno que son otro grupo de silicatos y la plagioclasa que son un subgrupo de los feldespato. La presencia de basalto también es importante en las muestras estudiadas, se trata de un tipo de roca ígnea, rica en silicatos de hierro, magnesio y sílice.
Los estudios del regolito lunar han permitido determinar que la cuarta parte de las partículas que forman el suelo lunar están aglutinadas, la distribución y las propiedades de las diferentes fases que componen las muestras varían entre los diferentes sitios y dependen de los procesos geológicos y la mineralogía de la roca de la cual se originan.
Cuando comparamos los suelos lunares con los suelos terrestres, el regolito lunar presenta una mayor uniformidad en cuanto a su composición mineralógica, esto se debe a que la roca madre tiene mucha menos variedad, mientras que los regolitos terrestres tienen un mayor diversidad de minerales y compuestos cementantes.
En los regolitos lunares se han encontrado menos de cien minerales distintos, mientras que en los de la Tierra se han identificado varios miles de minerales.
¿Cómo se forma un regolito?
Como ya hemos señalado, los regolitos se forman como consecuencia de la acción de los procesos de meteorización que se producen sobre la roca, provocado la fragmentación y/o desintegración del material y los minerales. Es importante señalar que el proceso de meteorización no se detiene, por lo que sobre estos regolitos seguirán actuando factores que continuarán afectando su estructura, deteriorando o fragmentando el regolito, en partes de menor tamaño.
En los procesos lunares debemos recordar que se generan regolitos de manera más frecuente de lo que puede suceder en la superficie terrestre, debido al bombardeo de meteoritos y la incidencia de la radiación solar, como factores determinantes en la formación de los mismos.
También es importante señalar que el tipo de roca y cementación de los materiales que la componen, determinaran el efecto que los procesos de meteorización producen en el material litológico presente, tanto en la superficie terrestre como en la superficie lunar.
Por lo tanto, para comprender mejor lo antes dicho vamos a explicar cómo sería el proceso sobre una roca de granito, la cual se caracteriza por presentar conglomerados de granos que se mantienen fuertemente unidos por sustancias cementantes, los factores que actúan sobre este material que forman parte del proceso de meteorización, generaran regolitos espesos difíciles de meteorizar.
Si por el contrario, el mismo proceso se produce sobre una roca sedimentaria donde las fuerzas de cohesión entre los granos que la componen son menos fuertes, la meteorización sobre este tipo de roca producirá un regolito que ofrecerá menos resistencia a los procesos biogeoquímicos, es decir, al movimiento e intercambio de elementos que alteran su composición y por ende los degrada, haciendo con el tiempo regolitos de menor tamaño, que en su momento pasarán a formar parte de la composición del suelo que se forme.
Como podemos observar, los regolitos se forman por la desintegración o transformación de material lítico, su calidad, tamaño y resistencia a los procesos de meteorización va a depender del tipo de roca, la cohesión de las partículas que la componen, las sustancias cementantes, el tamaño de las fracturas que se produzcan en la roca, entre otros factores.
Podemos entonces inferir que en zonas en donde existan fallas tectónicas con una alta actividad se producirán fracturas de las rocas, por lo que debemos esperar que sea una zona en la cual se formen gran cantidad de regolitos, en comparación con otros lugares de mayor estabilidad.
Sobre la superficie de la Tierra, actúan entonces una serie de factores y variables ambientales que inciden sobre la roca, las grietas o fisuras que se produzcan sobre este material lítico, son también espacios y superficies para que actúen factores como el agua, el aire y se generen reacciones químicas que fracturan la roca, produciendo en consecuencia un regolito.
Sobre la superficie Lunar actúa el bombardeo de micrometeoritos que rompieron las rocas lunares en fragmentos más pequeños, generando así los regolitos lunares.
El regolito lunar es el resultado de una serie de procesos de impacto y procesos erosivos que han generado una mezcla de partículas, que tienen diferentes formas y que además tienen diferente tamaño, pudiendo ser de micras de tamaño hasta rocas de importante talla. La erosión de la superficie de la luna, producida como consecuencia de la acción de los vientos o del agua, elimina partículas más pequeñas de arena y polvo, dejando rocas más grandes.
¿Cuál es la importancia de los regolitos lunares? son un excelente aislante térmico y proveen una cobertura eficiente que protege de alguna manera el material que se encuentra por debajo de este, así protege al lecho rocoso de los impactos de tamaño pequeño a moderado de los micrometeoritos, lo que contribuye a redistribuir la energía.
Los investigadores suponen que los satélites asteroides pueden generarse del regolito que es levantado de las superficies por la ausencia de fuerzas de gravedad y esos satélites pueden evolucionar desde allí.
También los fragmentos de regolito lunar son de gran interés para los científicos, debido a que proporcionan información valiosa sobre las rocas de las cuales estos fueron originados, en algunas oportunidades el tipo de roca que originó el regolito se encuentra en lugares distantes al sitio donde se tomó la muestra estudiada, por lo que también en el análisis se puede obtener información adicional que permite inferir la forma o el factor que influye en el transporte de material.
El peligro del regolito para los seres humanos
Cuando se realizan análisis de la composición, estructura, tamaño, entre otras características del regolito lunar, no solo se tiene la intención de conocer sobre su origen, factores que intervienen en su formación, entre otras inquietudes que permitan conocer sobre nuestro satélite natural.
Estos estudios también tiene la finalidad de conocer sobre sus propiedades y los posibles efectos que pueda tener este tipo de material lunar, sobre la salud de los astronautas que han estado en contacto con él, debido a la necesidad de generar los protocolos y procedimientos preventivos que deban cumplir al momento de realizar el trabajo de muestreo en la superficie de la Luna, así como también las consecuencias que pueda generar traer este tipo de material lunar al planeta Tierra.
Las partículas de regolito lunar son muy finas, como hemos señalado anteriormente presentan un color oscuro y tienen gran capacidad de abrasión. Los estudios realizados sobre este material lunar señalan que las partículas tienen un tamaño promedio superior a 65 micras, sin embargo, pueden encontrase partículas de 0,01 micras hasta 800 micras. Adicionalmente, los estudios realizados en la superficie lunar muestran que existen suelos enterrados, por lo que son superficies estratificadas.
Los regolitos lunares tienen influencia de la exposición a la que fueron sometidos por los impactos de los micrometeoritos y también del ambiente eólico solar, gases raros y más. Estos regolitos adquieren la carga que perciben del entorno, por lo que pueden exhibir un comportamiento inusual, en donde se incluye la levitación y el transporte a través de la superficie.
En consecuencia a todas las características antes señaladas, el regolito lunar, sobretodo la fracción fina, contribuye tanto con el aumento de los riesgos operacionales, como los riesgos asociados a la salud.
También recordemos que la superficie de la Luna, ante la ausencia de una atmósfera que la proteja, se encuentra expuesta a los constantes bombardeos de partículas subatómicas y atómicas, que vienen cargadas del Sol y de las estrellas, lo que ha creado la presencia de gases y generado radionúclidos que diferencian a las partículas de regolito lunar de las rocas terrestres.
Las partículas pequeñas de la superficie lunar son las que revisten un mayor riesgo para los seres humanos, entre las posibles afecciones a la salud se encuentra la exposición a altas temperaturas, pues como los regolitos lunares son oscuros, crean una superficie que actúa como cuerpo negro, que absorbe mayor radiación.
Otro riesgo a la salud asociado a la exposición o contacto con los regolitos lunares, son los probables daños generados a los pulmones, por la aspiración directa de las partículas pequeñas, lo que puede provocar la inflamación de los mismos y potenciar el riesgo a desarrollar enfermedades graves como cáncer.
En este sentido, se han realizado estudios de laboratorio, que han demostrado que la exposición directa a este tipo de polvo afecta hasta el 90% de las células expuestas.
También se ha demostrado que pueden causar daños importantes en la cadena de información genética. No podemos olvidar que el regolito que se encuentra sobre la superficie lunar ha sido generado mayormente por el bombardeo de meteoritos durante millones de años. Están cargados electrostáticamente, por lo que se adhiere con facilidad al cuerpo y a la ropa de los astronautas.
Se pueden comparar los efectos de inhalar polvo de regolito lunar, con las consecuencias que puede generar en los trabajadores de una mina inhalar polvo de la misma, ambos pueden producir o desencadenar reacción alérgica, irritación ocular, bronquitis y cicatrización del tejido que forma a los pulmones.
Adicional a los problemas que se pueden generar en el sistema respiratorio, también es posible que surjan problemas cardiovasculares, por la inhalación de nano partículas que lleguen al torrente sanguíneo, afectando también el sistema nervioso.
Quizá se pregunten ¿cómo será posible inhalar polvo lunar si los astronautas están protegidos con un traje especial y un casco para poder respirar?, es cierto, pero no podemos olvidar que las partículas pequeñas de regolito se adhieren a la ropa espacial y este puede ser un medio de transporte hasta la zona segura de la nave espacial.
De hecho, existen registros donde los astronautas han referido sentir molestias en los ojos, problemas de dermatitis y vías respiratorias superiores, los cuales posiblemente estén asociados al contacto con el regolito lunar.
Sin embargo, el polvo lunar no solo es capaz de dañar la salud de los astronautas, sino también a los equipos de las expediciones a causa del desgaste en las superficies metálicas y uniones, sobre los revestimientos de las juntas que se utilizan para sellar el equipamiento del vacío del espacio, en lentes ópticas, paneles solares, ventanas y en el cableado.
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