El universo es infinito, según dicen muchos documentos, escritos, enciclopedias y demás textos en el que se desarrolla este tipo de temas. Pero vamos a estudiar Dónde termina el universo realmente y su capacidad para albergar tantos objetos y esferas celestes que vemos en el cielo durante una noche estrellada.
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¿Dónde termina el universo?
En primer lugar vamos a definir de qué se trata el universo, y es que su definición está basada en un conjunto de objetos celestes y las distancias o espacios que los separa.
No hay duda de que el origen y la evolución del universo ha permanecido desde tiempos remotos en total discusión por sus características y cualidades, esto ha generado bastantes disyuntivas en los pensadores, filósofos y demás personajes que se han incluido en estos estudios y de los que a veces se torna imposible que surja un acuerdo.
Los observadores y estudios actuales, especialmente los basados en conclusiones de la teoría de la relatividad, han aportado nuevos conceptos como la dilatabilidad del universo, las teorías de su constitución a partir de una masa central de hidrógeno, la teoría de la naturaleza pulsante, a partir de un núcleo en continuo estado de alternativas dilataciones y contracciones, etc.
A pesar de los avances científicos y de las técnicas de observación actuales, no se ha podido establecer con certeza ninguna de estas teorías.
Es infinito
Debemos considerar en primer lugar que para determinar Dónde termina el universo es importante saber su origen y formación y la constante evolución que según los estudios de los astrónomos y científicos, se encuentra en expansión permanente, por lo que es imposible determinar Dónde termina el universo.
Por ejemplo, entre las definiciones que también se le da y que se relaciona con su tamaño o Dónde termina el universo es que es un modelo que sufrió una expansión extraordinariamente rápida en los primeros 10 segundos después de la gran explosión inicial o mejor conocida como la teoría del Big Bang. (Ver articulo: Big Bang).
Es decir, que una vez ocurrida la gran explosión, el universo no se ha detenido en expandirse y extenderse para albergar a cientos de miles de millones de objetos de todos tamaños astronómicos, de los que daremos un ejemplo para tener una idea más o menos de Donde termina el universo.
En un 90% la materia se presenta bajo la forma de hidrógeno y se concentra principalmente en estrellas y galaxias. El universo tiene una edad estimada de 15.000 millones de años y a pesar de los conocimientos actuales, no se puede conocer con exactitud su volumen.
Esta dificultad viene determinada por las enormes distancias que separan los cuerpos celestes y por la limitación de la velocidad de la luz (aproximadamente 300.000 km/s). Esto ha obligado a los profesionales y expertos a recurrir a instrumentos astronómicos siempre más potentes, sobre todo en el campo óptico, como por ejemplo telescopios con avanzada tecnología según van corriendo los tiempos.
La magnitud nos da una idea
Los instrumentos y herramientas al alcance en el momento de los estudios han permitido estudiar los confines del universo y detectar objetos cada vez más lejanos.
Aun así, basta con tener en cuenta los siguientes datos para hacerse una idea de la magnitud del universo, como por ejemplo: La Tierra, Mercurio, Venus, Marte, Júpiter, Saturno, Urano, Neptuno y Plutón, sin contar los cerca de 3.000 asteroides y cometas que giran alrededor del sol, forman el sistema solar, cuyo diámetro es de 150 millones de kilómetros. (Ver artículo: Cómo se formó el sistema solar).
Éste se encuentra situado en el extremo de uno de los brazos de una galaxia espiral compuesta por entre 100 y 200 millones de estrellas, la Vía Láctea; su diámetro es de 100.00 años luz. La galaxia más próxima, la nube de magallanes, se encuentra situada a 200.00 años luz y la siguiente, la galaxia de Andrómeda M-31, a 2 millones de años luz. (Ver artículo: Vía Láctea y Andrómeda.)
Otro dato curioso e importante es que la Vía Láctea increíblemente forma parte de más de 7 millones de galaxias localizadas en el espacio exterior, lo que nos hace determinar entonces, que si el universo permanece en expansión desde su origen hasta la actualidad, se hace incalculable determinar Dónde termina el universo.
Por ejemplo, otras connotaciones que se manejan del universo es que en su calificativo de universo cerrado, significa que la densidad de energía es insuficiente para detener, por la atracción gravitacional, su expansión, que se convierte en contracción al llegar a un cierto límite.
Esto quiere decir, que sumando solamente los tamaños astronómicos de cada objeto antes mencionado que se encuentran al rededor del sol, no habría cifra que pudiera encerrar todo el compendio de los elementos y determinar con ésto Dónde termina el universo.
